Como cada 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medioambiente. Esta fecha fue establecida por la Asamblea General de Naciones Unidas en 1972. El objetivo del mismo es sensilibizar a la opinión mundial en temas medioambientales y generar la conciencia necesaria para lograr un cambio de actitud en la ciudadanía.
•“Piensa, Aliméntate, Ahorra” es el lema con el que la FAO ha bautizado este año el Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra hoy, pretendiendo con ello dar a conocer el impacto moral, económico y medioambiental que pueden llegar a tener las decisiones alimentarias de la ciudadanía.
•Se estima que un tercio de los alimentos se pierden o son desechados, desperdiciando igualmente los recursos empleados en su producción.
•Mongolia fue designada sede del Día Mundial del Medio Ambiente 2013 en respuesta al trabajo que viene desarrollando en el proceso de transición hacia una economía verde de sus sectores más productivos.
•Con el ánimo de contribuir a la causa, Sogama editó en su momento una publicación “Para repañar o plato!” en la que da buena cuenta de exquisitos menús elaborados a partir de sobras de comidas.
•A su vez, el MAGRAMA presentaba el pasado mes de abril la estrategia “Más alimento, menos desperdicio”, contemplando en la misma distintas áreas de actuación entre las que habría que reseñar el análisis y revisión de los aspectos normativos que incidan sobre la generación de alimentos desechados, así como la reciente derogación de la fecha límite de venta del yogur.
Cerceda, a 5 de juniode 2013.- Hoy se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, una jornada con la que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura (FAO) pretende fomentar la sensibilización de la población en torno a la necesaria protección del entorno, promoviendo al mismo tiempo la atención y acción política y social al respecto.
Ante la alarma suscitada por el elevadísimo porcentaje de alimentos que acaban en el cubo de la basura, con el lema elegido para este año “Piensa. Aliméntate. Ahorra” se pretende dar a conocer el impacto ecológico, económico y social que tienen nuestras decisiones alimentarias y cómo tomarlas.
Y es que, según la FAO, cada año se desperdician en el mundo 1,3 billones de toneladas de comida, cifra equivalente a la producción alimentaria de todo el África Subsahariana; dato que contrasta con el hecho de que 1 de cada 7 personas del planeta se va a la cama hambrienta y más de 20.000 niños menores de 5 años mueren de inanición cada día.
Si bien la Tierra trata de ofrecer los recursos necesarios para sus 7 billones de habitantes, con una previsión de 9 millones para 2050, se estima que un tercio de la producción alimentaria se pierde o se desecha. No en vano, la producción global de alimentos ocupa un 25 por ciento de la superficie habitable, un 70 por ciento del consumo de agua, un 80 por ciento de deforestación y un 30 por ciento de gases, posicionándose, por tanto, como una de las actividades que afectan en mayor medida a la pérdida de biodiversidad y a los cambios en el uso del suelo.
Es por ello que la producción, comercialización y consumo de alimentos exige un cambio de rumbo que permita invertir una tendencia que está ocasionando serios perjuicios de todo tipo. Se hace necesario, por tanto, abrir la puerta a ciertas decisiones que permitan reducir la generación de desechos, ahorrar dinero y disminuir el impacto medioambiental.
MONGOLIA, SEDE DEL DÍA MUNDIAL DEL MEDIO AMBIENTE 2013
Así lo anunció en su momento el Programa de la ONU para el Medio Ambiente (PNUMA) durante la reunión mantenida el pasado mes de febrero en Nairobi con el objetivo de discutir las estrategias para un futuro sostenible. La elección de Mongolia se debe fundamentalmente al trabajo y esfuerzo que viene desarrollando en la transición hacia una economía verde de sus sectores más productivos.
EXQUISITOS MENÚS A PARTIR DE SOBRAS DE COMIDA
Sogama también quiere aportar su pequeño grano de arena en el proceso de concienciación social sobre la imperiosa necesidad de reducir los desechos de alimentos. Y con este objetivo editó en su momento una publicación gastronómica que, bajo el título “Para repañar o prato!”, presenta exquisitos menús elaborados a partir de sobras de comida, poniendo freno al incesante derroche de ingredientes que pueden ser, y de hecho lo son, perfectamente aprovechables a través de nuevas preparaciones culinarias. Entrantes, carnes, pescados y postres constituyen los apartados en los que se estructura la edición, que a su vez proporciona trucos y consejos con los que propiciar una mejor conservación de los alimentos.
A través de este recetario se pretende trasladar igualmente al lector una serie de recomendaciones con las que disminuir la generación de residuos en la compra. Así, se destaca la necesidad de planificar el consumo, hacer una lista de lo realmente necesario y no dejarse llevar por las ofertas de productos irrelevantes, utilizar el carro de la compra, evitando el malgasto de bolsas de plástico de un solo uso, rechazar los envases y envoltorios superfluos y, sobre todo, emplear el sentido común.
MÁS ALIMENTO, MENOS DESPERDICIO
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) presentó en abril la estrategia “Más alimento, menos desperdicio”, que tiene por objetivo limitar y reducir las pérdidas de alimentos. Las grandes áreas de actuación en las que se basará el desarrollo de esta iniciativa se centrarán en la realización de estudios “para conocer cuánto, cómo, dónde y el porqué del desperdicio de alimentos”. Para ello se procederá a la elaboración de guías de buenas prácticas y acciones de sensibilización dirigidas a los agentes de la cadena alimentaria, la restauración y los consumidores; al análisis y revisión de los aspectos normativos que incidan sobre la generación de alimentos desechados, como la reciente derogación de la fecha límite de venta del yogur; al impulso de actuaciones en colaboración con otros agentes para reducir el desperdicio y maximizar la redistribución de alimentos desechados; y al fomento del diseño y desarrollo de nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia en el aprovechamiento de productos.
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